"Padre rico, padre pobre" (1997) es un libro de Robert Kiyosaki que contrasta las perspectivas sobre el dinero y la educación financiera que recibió de dos figuras paternas en su vida: su padre biológico, a quien llama "padre pobre", y el padre de su mejor amigo, a quien se refiere como "padre rico". A través de estas dos influencias, Kiyosaki presenta conceptos clave sobre la gestión del dinero, la inversión y la creación de riqueza. El "padre pobre" representa la mentalidad tradicional de trabajar por un salario, ahorrar y depender de un empleo seguro, mientras que el "padre rico" enseña la importancia de la educación financiera, la inversión en activos y la creación de flujos de ingresos pasivos.
El libro enfatiza la necesidad de cambiar la mentalidad sobre el dinero. Kiyosaki argumenta que muchas personas son educadas para ser empleadas y no para convertirse en inversionistas o emprendedores. Resalta la importancia de adquirir activos que generen ingresos, en lugar de pasivos que consuman dinero. A lo largo del libro, Kiyosaki comparte lecciones sobre la inversión en bienes raíces, el emprendimiento y la importancia de la educación financiera como un medio para alcanzar la libertad financiera.